Mercedes-Benz inaugura la primera planta de reciclaje de baterías
Esta semana, Mercedes-Benz ha inaugurado la primera planta de reciclaje de baterías en Europa, utilizando un proceso mecánico-hidrometalúrgico integrado. Con esta instalación, la compañía se convierte en el primer fabricante de automóviles en el mundo en cerrar el ciclo de reciclaje de baterías de manera autónoma. Esta planta no solo impulsa la economía circular, sino que también resalta el compromiso de Mercedes-Benz con la innovación y la reducción del consumo de recursos primarios valiosos.
Tasa de Recuperación Excepcional
A diferencia de los métodos de reciclaje tradicionales, la nueva planta cuenta con una tasa de recuperación superior al 96%. Esto permite recuperar materiales escasos y valiosos, como litio, níquel y cobalto, que serán reutilizados en la fabricación de nuevas baterías para los futuros vehículos eléctricos de Mercedes-Benz.
La empresa Primobius es el socio tecnológico detrás del desarrollo de esta planta, que recibe financiación del Ministerio Federal de Economía y Acción Climática de Alemania. Este proyecto involucra la colaboración de tres universidades alemanas y abarca toda la cadena de reciclaje, desde la logística hasta los conceptos de reintegración. Así, Mercedes-Benz y sus socios contribuyen al crecimiento de la industria de reciclaje de baterías en Alemania.
Compromiso con la Sostenibilidad
“Con la apertura de esta planta de reciclaje mecánico-hidrometalúrgica, estamos marcando un hito en la promoción de la sostenibilidad dentro de nuestros procesos de fabricación. En Mercedes-Benz, creemos en crear valor a largo plazo para la mayor cantidad posible de personas a nivel global. Este tipo de iniciativas nos permite abordar el manejo de baterías, uno de los grandes desafíos en el uso de vehículos eléctricos”, afirmó Juan Felipe Salgado, Managing Director de Mercedes-Benz en Colombia.
Proceso Integrado de Reciclaje
Gracias a la colaboración con Primobius, esta planta cubre por primera vez en Europa todas las etapas del reciclaje de baterías, desde el triturado de módulos hasta el secado y procesamiento de materiales activos. El proceso mecánico separa plásticos, cobre, aluminio y hierro en múltiples etapas. Posteriormente, el proceso hidrometalúrgico se centra en la “masa negra”, que contiene los materiales activos de los electrodos de las celdas de batería. Mediante un proceso químico, se extraen metales valiosos como cobalto, níquel y litio, que cumplen con los estándares de calidad necesarios para la producción de nuevas celdas.
A diferencia de otros métodos, el proceso hidrometalúrgico consume menos energía y genera menos residuos. Con temperaturas de operación de hasta 80 grados Celsius, esta planta reduce el consumo energético. Además, al igual que otras instalaciones de Mercedes-Benz, la planta de reciclaje opera con neutralidad de carbono y utiliza electricidad 100% verde. El edificio, que se extiende sobre 6,800 metros cuadrados, cuenta con un sistema fotovoltaico con una capacidad máxima de más de 350 kilovatios.
Capacidad de Producción y Futuro
La planta de reciclaje de baterías de Mercedes-Benz en Alemania tiene una capacidad anual de 2,500 toneladas. Los materiales recuperados permitirán la producción de más de 50,000 módulos de batería para nuevos modelos eléctricos de la marca. Los conocimientos adquiridos en este proceso podrían facilitar un aumento en los volúmenes de producción a mediano y largo plazo.