El Lado Oculto de la Gastronomía en Bogotá
1. Sachi – Cocina Peruana del Chef José López
Ubicado en Quinta Camacho, Sachi es el destino ideal para los amantes de la auténtica gastronomía peruana. El chef José López ofrece platos que capturan la esencia de Perú, como la fresca causa limeña, el ceviche en leche de monja, el sabroso lomo saltado y el delicioso suspiro limeño. Con ingredientes frescos y una ejecución impecable, Sachi es un verdadero rincón peruano en Bogotá que transporta a los comensales a la esencia del país andino. Sachi no es solo un restaurante, sino una ventana directa a la tradición culinaria de Perú, y su calidad es tan notable que ha logrado ganarse el favor de la embajada de Perú en Colombia.
2. Chamánico – Investigación Gastronómica y Espiritual de la Chef Alejandra Ospina
En el corazón de La Candelaria, Chamánico ofrece una propuesta gastronómica única que va más allá de la simple comida: es una experiencia profunda que conecta el cuerpo, la mente y el espíritu a través de los alimentos. Dirigido por la chef Alejandra Ospina, este restaurante es un viaje hacia las raíces de la biodiversidad colombiana, explorando el alimento desde una perspectiva ritual, medicinal, mágico-espiritual y culinaria.
Uno de los platos más representativos es el tawaintisuyu, un homenaje a las tradiciones andinas que fusiona productos autóctonos con un enfoque moderno y consciente. En Chamánico, la comida se convierte en una meditación sobre la conexión con la naturaleza, y cada bocado tiene un propósito más allá del simple placer culinario: es una invitación a la reflexión, al entendimiento y al respeto por lo que nos da la tierra. Si buscas una experiencia más allá de la gastronomía, Chamánico es el lugar para ti.
3. Pizzardi – Pizzería Certificada por Nápoles Italia
Pizzardi es el lugar perfecto para los amantes de la auténtica pizza napolitana en Bogotá. Situada frente al Centro Comercial El Retiro, Pizzardi es la primera pizzería certificada por la Asociación de Pizzerías Nápoles en Bogotá, lo que garantiza que cada pizza que se sirve es fiel a la tradición napolitana. Fundada por la empresaria Andrea Bornacelli, esta pizzería ha logrado crear un espacio donde la calidad de los ingredientes y el amor por la pizza se fusionan en cada bocado.
Desde la Margherita, con su masa suave y aireada, hasta la Diavola, con un toque picante perfectamente equilibrado por el queso mozzarella de búfala, cada pizza en Pizzardi refleja la maestría de la pizza napolitana. Lo que distingue a este lugar es su fidelidad a la tradición, sin olvidar las adaptaciones que hacen de cada plato una experiencia única en Bogotá. Es un lugar ideal para quienes buscan lo auténtico y lo delicioso, sin pretensiones.
4. The Shrimp Alley – El Restaurante Más Pequeño de Bogotá
En la zona G, un pequeño restaurante se destaca por su enfoque único en los langostinos: The Shrimp Alley. Este es el restaurante más pequeño de Bogotá, pero su tamaño no impide que ofrezca una de las mejores experiencias culinarias en la ciudad. El chef Andrés Ortega, un ex tripulante de Avianca, ha logrado crear un concepto único que hace de la simplicidad una virtud.
A través de su ventana, Ortega sirve langostinos frescos, preparados a la parrilla con un toque de limón y hierbas, lo que permite que el sabor natural del marisco sea el protagonista. El menú es corto, pero cada plato está pensado para resaltar lo mejor del langostino: su textura suave y su sabor delicado. Es una experiencia que se disfruta de principio a fin, y aunque el espacio es reducido, el sabor es absolutamente grande. La calidad y frescura de los ingredientes, junto con el toque personal de Ortega, hacen de The Shrimp Alley un lugar de visita obligada para quienes buscan una experiencia auténtica y deliciosa en Bogotá.